Se cumple un año de la devastación en Malecón Tajamar
Cancún.- Que el desarrollo inmobiliario de Malecón Tajamar, que involucra multimillonarias inversiones en dólares, se encuentre detenido y en manos de los tribunales, representa un gran logro de la ciudadanía y ejemplo de que con la unión de la gente se pueden detener atropellos, manifestó la presidenta del Grupo Ecologista del Mayab (GEMA), Aracely Domínguez Rodriguez.
Sostuvo que independientemente de las diferencias que existan entre los grupos involucrados, la lucha por la defensa y rescate de la zona permanece vigente.
Por su parte, Carlos Gamboa abogado de la asociación “La tierra nuestra casa”, sostuvo que la lucha en contra de desarrollo inmobiliario de Tajamar está en manos de la justicia y “ni siquiera la mano” del presidente de México, Enrique Peña o del gobernador Carlos Joaquín, podrán definir su futuro.
Aseveró que justo cuando se cumple un año de que se devastó la zona, las autoridades comenzaron una labor de desinformación para decir que el proyecto está destrabado.
“Por más que diga el gobierno federal lo que quiera, al final lo que cuenta es la resolución de los Jueces correspondientes”, aseveró.
En el caso de la agrupación “Salvemos Manglar Tajamar”, Aracely Domínguez dijo que a un año de la fuerte devastación que se cometió en la zona, y sin una resolución definitiva en los procesos legales, ellos mantendrán la defensa del ecosistema.
La activista recordó que este lunes 16 de enero se cumple un año de la devastación de la zona y que desafortunadamente no se ha castigado a los responsables de ese ecocidio, entre ellos el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
-Muchas de las dependencias involucradas actuaron como delincuentes y no recibieron castigo, esperamos que la justicia actúe también en esos casos-, expresó.
Aseveró que por fortuna el caso está alejado de los políticos y las autoridades, que será la justicia la que defina.
Dijo que actualmente siguen sin resolverse dos juicios de nulidad con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) que no colocó sellos de suspensión en toda el área afectada, entre seis y ocho amparos para suspensión definitiva, la solicitud a la Suprema Corte de Justicia para que tome el caso, además de las pruebas por devastación de más zonas de las que se tenían autorizadas desde 2005 y será el próximo 19 de febrero cuando se tenga la audiencia constitucional.
Indicó que como parte de la conmemoración de la devastación, el domingo se reunieron integrantes de la agrupación para tomar fotos y videos de los nuevos brotes de manglar, con los peces que demuestran la existencia de agua salobre y la conexión con la laguna y que este lunes tendrán un bazar en donde recibirán donaciones de la ciudadanía.
El 4 de enero de 2016, un grupo de trabajadores con apoyo de maquinaria pesada empezó a desmontar la vida silvestre en predios de malecón Tajamar.
El operativo generó molestia e inconformidad en la población, sobre todo porque se contó con la protección de la Procuraduría General de la Republica (PGR) y personal de la Dirección de Ecología del Ayuntamiento de Benito Juárez.
Sin embargo, no pudieron avanzar por la movilización que ese día realizaron, primero, ambientalistas, luego vecinos y finalmente cancunenses.
Aun así, el 16 de enero de 2016, respaldados por elementos de la policía municipal y federal, más de 50 camiones de volteo, pipas de agua y excavadoras ingresaron de madrugada a la zona de Malecón Tajamar.
La incursión comenzó a las 2 de la mañana con la devastación de las áreas verde y para evitar que los ambientalistas los frenarán; policía anti motines cercaron la zona con vallas.
Las imágenes de la devastación rápidamente se dieron a conocer en redes sociales y conmocionaron a alcanzaron trascendencia internacional.
Dependencias federales como FONATUR y PROFEP fueron severamente señaladas como responsables de permitir el ecocidio e incluso en la actualidad se cuestiona la venta de esos predios ubicados sobre manglar para la construcción de proyectos comerciales y residenciales.
De acuerdo con datos recabados entre diferentes instancias, en el 2016, se interpusieron 400 denuncias relacionadas con el proyecto del Malecón Tajamar y cinco amparos que fueron buscando por la misma ciudadanía, aunque hasta ahora no se ha logrado la suspensión.
Desde hace un año, asociaciones y ciudadanía en general se han manifestado en la zona destruida y mantienen su postura de que no permitirán que se siga haciendo daño al patrimonio de Cancún.