Obispo Pedro Pablo Elizondo convoca a la paz social en Cancún
Cancún, 25 de marzo, (Infoqroo).- El Obispo de la Prelatura Cancún-Chetumal, Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, encabezó las celebraciones del Domingo de Ramos en la catedral de la Santísima Trinidad, con lo que iniciaron las actividades de la Semana Santa.
Minutos antes del mediodía, cientos de católicos llegaron puntuales a la Catedral para participar en la bendición de ramos y palmas, y en la procesión a la entrada principal de la Catedral de Cancún.
El Obispo de la Prelatura Cancún-Chetumal bendijo las palmas para enseguida encabezar la procesión hacia la Catedral e iniciar la misa de 12.
En su mensaje, recordó que la procesión recuerda la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, en medio de una multitud que lo aclamó como Mesías.
Añadió que la procesión es un signo de contradicción, ya que algunos aclamaban a Jesús y otros lo rechazaban.
“(A Jesucristo) Unos lo amaban mucho, mientras que, otros lo querían matar y al final Jesús triunfo y resucitó”, precisó.
Posterior a la procesión, los católicos escucharon el mensaje del Obispo quien al concluir la misa, otorgó la bendición.
En entrevista que concedió al final de la Misa, Monseñor Elizondo Cárdenas señaló que precisamente por ser la Semana Santa, la de mayor afluencia de turistas, hace un llamado, “una invocación y una súplica” a que todo se mantenga en paz.
“Para que sea el saldo blanco y toda la gente que viene con tanta alegría entusiasmo, ilusión a disfrutar de unos días de descanso en Cancún, en la Riviera Maya, en Quintana Roo no se vayan decepcionados, no se vayan desencantados”, agregó.
“No podemos desencantarlos porque el encanto del mar del paraíso natural y paraíso digamos de la acogida, de la hospitalidad que tenemos los mexicanos no pueden ellos desencantarse”, añadió.
Asimismo, dijo que como sociedad, también se debe trabajar para tener ese paraíso humano, no sólo ecológico sino natural, sino social y humano de acogida de hospitalidad, de cordialidad, que es ya proverbial.
“Nosotros los mexicanos somos la encarnación de la hospitalidad así nos ven los europeos. Que no se desencanten y que nosotros entonces, no solamente cumplamos y superemos las expectativas de los turistas que vienen”, añadió.
Sostuvo que la sociedad debe aprender a ser humilde, a no responder con violencia, a tener paciencia, aprender la solidaridad, a la tolerancia hacia los demás y a convivir todos.
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