Cancún carece de mecanismos para reaccionar ante una crisis
Cancún.- El presidente de la Asociación de Plazas Comerciales de Cancún, Eduardo Galaviz Ibarra consideró que si bien se trató de un incidente inédito, el ataque a la Fiscalía General del Estado, obliga a repensar y establecer mecanismos para el manejo de crisis.
Sostuvo que un momento de crisis debe ser aprovechado como una experiencia para saber reaccionar de mejor manera ante otra situación similar, consideró Eduardo Galabiz Ibarra, presidente de la Asociación de Plazas Comerciales.
En ese sentido, consideró pertinente crear un protocolo de actuación ante emergencias como el ataque a la fiscalía del martes pasado.
“Es necesario establecer un protocolo de actuación y comunicación para saber cómo actuar en una situación así y evitar el caos que se generó con la desinformación, hay que tomarlo en cuenta. Actualmente no existe porque no había ese tipo de incidente anteriormente, ese tipo de terrorismo, tenemos protocolo de incendio, de algún huracán, pero de ese tipo de situaciones no podemos tener un antecedente previo porque no existía”, reconoció.
Hasta ahora, dijo, no existe una cuantificación económica de las pérdidas que sufrieron las plazas comerciales por haber tenido que cerrar antes de lo habitual, pero ya no hubo ventas y eso los daña directamente.
Por ello, consideró que la recomendación de manera general es que la población verifique siempre la información antes de difundirla, sobre todo que se establezcan lazos de comunicación oportunos con la autoridad porque ellos son los primeros responsables de compartir lo que realmente está ocurriendo.
“La exigencia es para que la autoridad, que es quien tiene que emitir la información, ponga a funcionar sus sistemas de comunicación, hay radio ayuntamiento, está el sistema quintanarroense de comunicación social, sus redes sociales, entonces que lo hagan con mayor prontitud, es lo que tiene que operar”, puntualizó.
Lo cierto, dijo, es que estos incidentes se salen de lo normal, del funcionamiento de la comunidad, por lo que se debe tener cuidado y no incurrir en rumores.
“De pronto se hablaba de balaceras por todas partes, incluidas plazas comerciales en donde no estaba pasando nada, pero provocó el cierre de los negocios, afectando económicamente a los establecimientos”, concluyó.